Questões de Concurso
Para funiversa
Foram encontradas 8.748 questões
Resolva questões gratuitamente!
Junte-se a mais de 4 milhões de concurseiros!
Texto V, para responder las preguntas de 26 a 37.
Masculinidad y feminidad, juventud y senectud
1 Las variaciones históricas no proceden nunca de
causas externas al organismo humano, al menos dentro de
un mismo período zoológico. Si ha habido catástrofes
4 telúricas — diluvios, sumersión de continentes, cambios
súbitos y extremos de clima — como en los mitos más
arcaicos parece recordarse confusamente, el efecto por ellas
7 producido trascendió los límites de lo histórico y trastornó la
especie como tal. Lo más probable es que el hombre no ha
asistido nunca a semejantes catástrofes. La existencia ha
10 sido, por lo visto, siempre muy cotidiana. Los cambios más
violentos que nuestra especie ha conocido, los períodos
glaciales, no tuvieron carácter de gran espectáculo. Basta
13 que durante algún tiempo la temperatura media del año
descienda cinco o seis grados para que la glacialización se
produzca. En definitiva, que los veranos sean un poco más
16 frescos. Conviene abandonar la idea de que el medio,
mecánicamente, modele la vida; por lo tanto, que la vida sea
un proceso de fuera a dentro. Las modificaciones externas
19 actúan sólo como excitantes de modificaciones
intraorgánicas; son, más bien, preguntas a que el ser vivo
responde con un amplio margen de originalidad imprevisible.
22 Cada especie, y aun cada variedad, y allí cada individuo,
aprontará una respuesta más o menos diferente, nunca
idéntica. Vivir, en suma, es una operación que se hace de
25 dentro a fuera, y por eso las causas o principios de sus
variaciones hay que buscarlos en el interior del organismo.
José Ortega y Gasset. La rebelión de las masas. Internet:
<www.laeditorialvirtual.com.ar> (adaptado).
La expresión “por lo tanto” (línea 17) introduce
Texto V, para responder las preguntas de 26 a 37.
Masculinidad y feminidad, juventud y senectud
1 Las variaciones históricas no proceden nunca de
causas externas al organismo humano, al menos dentro de
un mismo período zoológico. Si ha habido catástrofes
4 telúricas — diluvios, sumersión de continentes, cambios
súbitos y extremos de clima — como en los mitos más
arcaicos parece recordarse confusamente, el efecto por ellas
7 producido trascendió los límites de lo histórico y trastornó la
especie como tal. Lo más probable es que el hombre no ha
asistido nunca a semejantes catástrofes. La existencia ha
10 sido, por lo visto, siempre muy cotidiana. Los cambios más
violentos que nuestra especie ha conocido, los períodos
glaciales, no tuvieron carácter de gran espectáculo. Basta
13 que durante algún tiempo la temperatura media del año
descienda cinco o seis grados para que la glacialización se
produzca. En definitiva, que los veranos sean un poco más
16 frescos. Conviene abandonar la idea de que el medio,
mecánicamente, modele la vida; por lo tanto, que la vida sea
un proceso de fuera a dentro. Las modificaciones externas
19 actúan sólo como excitantes de modificaciones
intraorgánicas; son, más bien, preguntas a que el ser vivo
responde con un amplio margen de originalidad imprevisible.
22 Cada especie, y aun cada variedad, y allí cada individuo,
aprontará una respuesta más o menos diferente, nunca
idéntica. Vivir, en suma, es una operación que se hace de
25 dentro a fuera, y por eso las causas o principios de sus
variaciones hay que buscarlos en el interior del organismo.
José Ortega y Gasset. La rebelión de las masas. Internet:
<www.laeditorialvirtual.com.ar> (adaptado).
La expresión “Basta que” (líneas 12 y 13) puede ser reemplazada sin producir alteraciones semánticas o gramaticales en el texto por
Texto V, para responder las preguntas de 26 a 37.
Masculinidad y feminidad, juventud y senectud
1 Las variaciones históricas no proceden nunca de
causas externas al organismo humano, al menos dentro de
un mismo período zoológico. Si ha habido catástrofes
4 telúricas — diluvios, sumersión de continentes, cambios
súbitos y extremos de clima — como en los mitos más
arcaicos parece recordarse confusamente, el efecto por ellas
7 producido trascendió los límites de lo histórico y trastornó la
especie como tal. Lo más probable es que el hombre no ha
asistido nunca a semejantes catástrofes. La existencia ha
10 sido, por lo visto, siempre muy cotidiana. Los cambios más
violentos que nuestra especie ha conocido, los períodos
glaciales, no tuvieron carácter de gran espectáculo. Basta
13 que durante algún tiempo la temperatura media del año
descienda cinco o seis grados para que la glacialización se
produzca. En definitiva, que los veranos sean un poco más
16 frescos. Conviene abandonar la idea de que el medio,
mecánicamente, modele la vida; por lo tanto, que la vida sea
un proceso de fuera a dentro. Las modificaciones externas
19 actúan sólo como excitantes de modificaciones
intraorgánicas; son, más bien, preguntas a que el ser vivo
responde con un amplio margen de originalidad imprevisible.
22 Cada especie, y aun cada variedad, y allí cada individuo,
aprontará una respuesta más o menos diferente, nunca
idéntica. Vivir, en suma, es una operación que se hace de
25 dentro a fuera, y por eso las causas o principios de sus
variaciones hay que buscarlos en el interior del organismo.
José Ortega y Gasset. La rebelión de las masas. Internet:
<www.laeditorialvirtual.com.ar> (adaptado).
La expresión “por lo visto” (línea 10) es reemplazable, sin producir alteraciones semánticas ni gramaticales en el texto por
Texto V, para responder las preguntas de 26 a 37.
Masculinidad y feminidad, juventud y senectud
1 Las variaciones históricas no proceden nunca de
causas externas al organismo humano, al menos dentro de
un mismo período zoológico. Si ha habido catástrofes
4 telúricas — diluvios, sumersión de continentes, cambios
súbitos y extremos de clima — como en los mitos más
arcaicos parece recordarse confusamente, el efecto por ellas
7 producido trascendió los límites de lo histórico y trastornó la
especie como tal. Lo más probable es que el hombre no ha
asistido nunca a semejantes catástrofes. La existencia ha
10 sido, por lo visto, siempre muy cotidiana. Los cambios más
violentos que nuestra especie ha conocido, los períodos
glaciales, no tuvieron carácter de gran espectáculo. Basta
13 que durante algún tiempo la temperatura media del año
descienda cinco o seis grados para que la glacialización se
produzca. En definitiva, que los veranos sean un poco más
16 frescos. Conviene abandonar la idea de que el medio,
mecánicamente, modele la vida; por lo tanto, que la vida sea
un proceso de fuera a dentro. Las modificaciones externas
19 actúan sólo como excitantes de modificaciones
intraorgánicas; son, más bien, preguntas a que el ser vivo
responde con un amplio margen de originalidad imprevisible.
22 Cada especie, y aun cada variedad, y allí cada individuo,
aprontará una respuesta más o menos diferente, nunca
idéntica. Vivir, en suma, es una operación que se hace de
25 dentro a fuera, y por eso las causas o principios de sus
variaciones hay que buscarlos en el interior del organismo.
José Ortega y Gasset. La rebelión de las masas. Internet:
<www.laeditorialvirtual.com.ar> (adaptado).
El vocablo “trastornó” (línea 7) se usa en el texto con el significado de
Texto V, para responder las preguntas de 26 a 37.
Masculinidad y feminidad, juventud y senectud
1 Las variaciones históricas no proceden nunca de
causas externas al organismo humano, al menos dentro de
un mismo período zoológico. Si ha habido catástrofes
4 telúricas — diluvios, sumersión de continentes, cambios
súbitos y extremos de clima — como en los mitos más
arcaicos parece recordarse confusamente, el efecto por ellas
7 producido trascendió los límites de lo histórico y trastornó la
especie como tal. Lo más probable es que el hombre no ha
asistido nunca a semejantes catástrofes. La existencia ha
10 sido, por lo visto, siempre muy cotidiana. Los cambios más
violentos que nuestra especie ha conocido, los períodos
glaciales, no tuvieron carácter de gran espectáculo. Basta
13 que durante algún tiempo la temperatura media del año
descienda cinco o seis grados para que la glacialización se
produzca. En definitiva, que los veranos sean un poco más
16 frescos. Conviene abandonar la idea de que el medio,
mecánicamente, modele la vida; por lo tanto, que la vida sea
un proceso de fuera a dentro. Las modificaciones externas
19 actúan sólo como excitantes de modificaciones
intraorgánicas; son, más bien, preguntas a que el ser vivo
responde con un amplio margen de originalidad imprevisible.
22 Cada especie, y aun cada variedad, y allí cada individuo,
aprontará una respuesta más o menos diferente, nunca
idéntica. Vivir, en suma, es una operación que se hace de
25 dentro a fuera, y por eso las causas o principios de sus
variaciones hay que buscarlos en el interior del organismo.
José Ortega y Gasset. La rebelión de las masas. Internet:
<www.laeditorialvirtual.com.ar> (adaptado).
El elemento “ellas” (línea 6) hacer referencia a
Texto V, para responder las preguntas de 26 a 37.
Masculinidad y feminidad, juventud y senectud
1 Las variaciones históricas no proceden nunca de
causas externas al organismo humano, al menos dentro de
un mismo período zoológico. Si ha habido catástrofes
4 telúricas — diluvios, sumersión de continentes, cambios
súbitos y extremos de clima — como en los mitos más
arcaicos parece recordarse confusamente, el efecto por ellas
7 producido trascendió los límites de lo histórico y trastornó la
especie como tal. Lo más probable es que el hombre no ha
asistido nunca a semejantes catástrofes. La existencia ha
10 sido, por lo visto, siempre muy cotidiana. Los cambios más
violentos que nuestra especie ha conocido, los períodos
glaciales, no tuvieron carácter de gran espectáculo. Basta
13 que durante algún tiempo la temperatura media del año
descienda cinco o seis grados para que la glacialización se
produzca. En definitiva, que los veranos sean un poco más
16 frescos. Conviene abandonar la idea de que el medio,
mecánicamente, modele la vida; por lo tanto, que la vida sea
un proceso de fuera a dentro. Las modificaciones externas
19 actúan sólo como excitantes de modificaciones
intraorgánicas; son, más bien, preguntas a que el ser vivo
responde con un amplio margen de originalidad imprevisible.
22 Cada especie, y aun cada variedad, y allí cada individuo,
aprontará una respuesta más o menos diferente, nunca
idéntica. Vivir, en suma, es una operación que se hace de
25 dentro a fuera, y por eso las causas o principios de sus
variaciones hay que buscarlos en el interior del organismo.
José Ortega y Gasset. La rebelión de las masas. Internet:
<www.laeditorialvirtual.com.ar> (adaptado).
La expresión “al menos” (línea 2) puede ser reemplazada sin producir alteraciones semánticas o gramaticales en el texto por
A função real f(x) é contínua em todo o seu domínio. Considerando-se que g(x) é a função derivada primeira de f(x) enquanto h(x) é a função derivada segunda de f(x), se g(x0) = 0, então é verdade que x0 corresponderá a um ponto de
Na expressão 10n . k = 50!, sabe-se que k não é divisível por 10. Dessa forma, n é igual a
Na expressão a² – b² = 79, na qual a e b são números naturais, o número b é
Ao resolver um problema de classificação de sistemas com o uso da Regra de Cramer, um professor encontrou corretamente todos os determinantes necessários, todos iguais a zero. De acordo com essas informações, é correto afirmar que o sistema é
Para qualquer valor real de a, o polinômio P(x) = (x – a) . (x – 3) . (x – 2) . (x – 1) . x . (x + 1) . (x + 2) + x³ – x² + 3x + 7 tem uma raiz real contida no intervalo
Uma professora do sétimo ano do ensino fundamental está ensinando equações de 1° grau a sua turma. Em certo momento da aula, ela registra na lousa a seguinte expressão: 8x + 12 = 16. Em seguida, na linha seguinte, a professora escreve: 8x = 16 – 12. Nesse momento da aula, a professora explica à turma o que ocorreu com o número 12 que estava no primeiro membro da equação. A explicação correta do ponto de vista matemático é a de que
Considere a função f(x) = cos x – sen x. Se g(x) é a função derivada de f(x) e h(x) é a função derivada de g(x), é correto afirmar que
Um sismógrafo é um aparelho usado para medir vibrações da crosta terrestre. Esse aparelho pode ser como o que é apresentado no esquema da figura acima. Nesse modelo de sismógrafo, o cilindro gira em velocidade constante, enquanto a agulha presa à massa oscilante registra quaisquer vibrações que atinjam o aparelho. Considere que o cilindro gire a uma velocidade igual a uma volta completa por dia. Considere também que, em um dia, o sismógrafo não tenha registrado nenhuma vibração e, por isso, tenha traçado uma linha reta na superfície do cilindro. Considere essa linha reta e uma linha vertical que corresponde a uma geratriz sobre a superfície lateral do cilindro. Considere, ainda, que a superfície lateral do cilindro seja planificada de modo que as duas linhas retas citadas tenham seu ponto de interseção sobre uma das diagonais do retângulo que corresponde a essa superfície lateral. Essas duas retas dividem a superfície lateral do cilindro em quatro regiões retangulares das quais
É possível resolver por fatoração a equação x² – 26x + 69 = 0. Uma forma de se fatorar essa equação é usar o procedimento conhecido como completar o quadrado. Para completar corretamente o quadrado no primeiro membro da equação, basta adicionar a cada um de seus membros um valor igual a
No plano cartesiano, a distância entre os pontos de interseção entre as curvas dadas pelas equações 2x + 3y – 14 = 0 e (x + 5)² + (y – 8)² = 144 é igual a
Considere que, em um lançamento de um dado comum de seis faces e honesto, a probabilidade de ocorrer um número múltiplo de três seja igual a p. Caso sejam realizados oito lançamentos consecutivos desse dado, a probabilidade de se obter um número múltiplo de três em exatamente cinco dos lançamentos é igual a
Acerca da genética de populações, assinale a alternativa correta.
O cariótipo que não afeta o fenótipo da pessoa portadora é o
O cariótipo mais frequentemente encontrado em recém-nascido com síndrome de Down é o